Por Raúl H. Pérez Navarrete
El día de ayer, los fans del
cómic conocimos la triste noticia del fallecimiento de Joe Kubert, dibujante
maravilloso y maestro de numerosos artistas, entre ellos sus hijos Andy y Adam.
En
honor a la verdad, la obra de Kubert me fue desconocida durante mis primeros
años como lector de historietas, no así el trabajo de sus hijos, a quienes
conocía gracias a cómics y tarjetas de los X-Men. Probablemente la primera vez
que me topé con la obra de Kubert fue a través de un anuncio de The Joe Kubert
School of Cartoon and Graphic Art publicado en el número 92 de Avengers West
Coast en el que aparecía Tor (personaje creado en 1953).
La idea de una escuela para aprender a hacer cómics fue durante mi infancia una idea muy atractiva y sugerente.
Este
año desaparecieron dos leyendas, el pasado 10 de marzo nos sorprendió la muerte
del genial Moebius y este 12 de agosto, la de Joe Kubert, quien no sólo deja
una amplia obra, sino también una escuela de la que han salido talentosos
artistas entre los que se encuentran Dave Dorman, Stephen Bissett y los ya
mencionados, Andy y Adam.
Descanse
en paz, Joe Kubert.
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