Hoy por la mañana me
encontré con una serie de tuits que el escritor Kurt Busiek (Marvels, Astro city) publicó a propósito de una serie de preguntas que le
hicieron a las autoras Gail Simone (Red
Sonja) y Kelly Sue DeConnick (Pretty
Deadly), así como un tuit publicado por editora y dibujante Deb Aoki. El
resultado es esta interesante reflexión que más tarde el escritor transcribió y
editó en su cuenta de Tumbrl:
Mansplaning*
Por Kurt Busiek
Nunca me han preguntado
cómo escribir personajes masculinos verosímiles. Me han preguntado sobre cómo
escribir personajes femeninos verosímiles, como si se trataran de seres
extraterrestres o algo parecido.
“¿Cómo escribo
personajes femeninos creíbles?”, para los escritores, consiste en esencialmente
preguntarse cómo escribir personajes que son diferentes a ti. Pero todos los
personajes son diferentes a ti, o deberían serlo, a menos que sean tú. Los
personajes son individuos, no categorías. Si tú estás escribiendo sobre ellos
como si fueran categorías, entonces estás haciéndolo mal.
Todos los personajes
son como tú en algún aspecto, y diferentes a ti en otros. ¿Cómo escribir sobre
los aspectos en donde son distintos a ti? De la misma manera en la que tú
escribes sobre cualquier otro personaje. Tienes ojos, oídos y un cerebro. Tú
escribes a partir de la observación, la experiencia, la investigación y el
análisis.
Si vas a escribir sobre
una mujer, tú no escribes sobre “una mujer”. Escribe sobre ella. Escribe ese
personaje, ese individuo. Escribe un personaje, no una categoría.
Hillary Clinton,
Sally Ride, Honey Boo-Boo y Dolley Madison no desean las mismas cosas ni
intentan obtenerlas de la misma manera, no provienen del mismo contexto, no tienen
las mismas familias, la misma educación, la misma perspectiva, etc. Justo como
ocurre con un grupo similar de hombres.
Escribe personajes a
partir de quiénes son ellos, qué desean, de dónde vienen, cómo enfrentan o huyen
de sus problemas, etc. Los personajes son individuos. Ellos se comportan como
nosotros, no como una expresión monolítica de su género, raza, religión o cualquier
otra cosa.
Si eres un agnóstico
blanco de Nueva Inglaterra y escribes sobre un católico del estado de Georgia,
estás escribiendo sobre alguien que es distinto a ti, y necesitas emplear la
observación, la experiencia, el análisis, la proyección, y tal vez la
investigación para hacerlo bien. Lo mismo ocurre si el personaje es una mujer o
un hispano o un transgénero, o si se trata de alguien que se encuentra a 180
grados de ti desde el punto de vista político o de cualquier cosa. Siempre estás
escribiendo sobre personajes que no son exactamente como tú.
Escribe sobre ellos
como individuos. ¿Qué desean?, ¿Cómo están tratando de obtenerlo? Trátalos como
individuos. Su género, el color de su piel, su contexto cultural, su
experiencia de vida, todas esas cosas moldearán quiénes son, qué quieren, cómo
enfrentan la vida. Aprovéchalo todo.
Si escribo sobre una mujer
negra de St. Louis que es una ex aviadora de la Marina cuyos padres tienen
doctorados, entonces ella será muy diferente a una estrella pop millonaria que
creció huérfana. Que ambas sean mujeres solo es una parte de quiénes son, y yo
necesito escribir a partir de todo aquello.
Con cualquier
personaje se trata de quiénes son, de dónde vienen, qué desean, cómo tratan de
conseguir eso que quieren. Cualquier personaje.
También es un consejo
útil si tienes que escribir sobre extraterrestres. O tu vecino.
*Palabra de difícil
traducción que se forma con las palabras inglesas "man" y
"explaining". Es un fenómeno social que “sucede generalmente cuando
un hombre asume que su interlocutora está menos informada o preparada en algún
tema por ser mujer, y procede a dar explicaciones vagas de manera
condescendiente en áreas en que ella suele ser experta.” (http://esceptica.org/2013/05/22/spanish-inquisition-dejame-que-te-explique/).
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