Cowboys vs. aliens

Por Raúl H. Pérez Navarrete

En 1969 Ray Harryhausen, el maestro de los efectos especiales, produjo una singular cinta llamada El valle de Gwangi, sobre un tiranosaurio capturado por vaqueros y exhibido en un espectáculo ambulante del viejo oeste. Más de 40 años después, Jon Favreau, célebre por el éxito de las cintas del superhéroe de Marvel comics Iron Man, sitúa un grupo de alienígenas secuestrando humanos en el territorio de Arizona a fines del siglo XIX.

Protagonizada por Daniel Craig, Harrison Ford y Olivia Wilde, la película se siente extraña, dada la obvia diferencia de géneros involucrados, pero a la vez logra ser verosímil, aunque podría ser fácilmente criticada por detalles como la rápida aceptación de los personajes de los inusuales hechos. Pese a lo anterior, Favreau logra un producto entretenido, cuyo público evidentemente se encuentra entre los consumidores de historietas y del cine de fantasía y ciencia ficción. No es casual, por ejemplo, que Harrison Ford se encuentre en el reparto.

El tono del filme resulta interesante pues, ante la premisa poco común, logra alejarse de un humor burdo en el que fácilmente pudo haber caído. Favreau explicó que su deseo era combinar los westerns de Sergio Leone y John Ford con cintas de ciencia ficción que involucran el horror tales como Alien y Depredador. Dicha declaración, dicho sea de paso, la ofreció durante la Comic-Con del año pasado, el escaparate perfecto para este tipo de cine en los últimos años.

No se trata de Bravestarr ni mucho menos de la pésima Wil wild west de Barry Sonnenfeld. Cowboys vs. Aliens no traslada elementos del western a la ciencia ficción ni mezcla tecnología contemporánea con la usada en el siglo XIX, la cinta de Favreau cumple con lo que el título anuncia y en ese aspecto no hay peros que valgan.

Completan el reparto Sam Rockwell (Guía del viajero intergaláctico), Noah Ring (El último maestro del aire), Paul Dano (Little Miss sunshine), Clancy Brown (Superman/Batman: Public enemies), Adam Beach (La conquista del honor) y Ana de la Reguera (Por la libre).